Esta semana, en la madrugada del lunes en España, los New England Patriots se enfrentan a los Tampa Bay Buccaneers para el 'Sunday Night Football' de la Semana 4 de la NFL. Los actuales campeones visitarán a la última gran dinastía en lo que supondrá el regreso del hijo pródigo Tom Brady al Gillette Stadium. El reencuentro con su antiguo entrenador Bill Belichick ha vuelto a abrir el debate entre ambas figuras históricas del fútbol americano. Repaso la larga historia del dúo más destacado que construyeron la dinastía de los New England Patriots y analizo la nueva actualidad de ambas figuras antes de su encuentro. El partido más esperado en la NFL: el regreso.
Comencemos por el contexto actual, los Bucs son los defensores del Vince Lombardi tras una exitosa primera temporada de Tom Brady en Tampa Bay. El veterano quarterback venció su séptimo anillo del Super Bowl tras vencer a los Chiefs de la nueva estrella de la liga, Patrick Mahomes (revive el partido con la crónica). Esta temporada continuaron su camino triunfal con victorias sobre Cowboys y una paliza a los Falcons, entre ambos juegos Brady con sus 44 años lanzó 9 touchdowns a un gran nivel. El último partido fue el primero fuera de casa, en el espectacular SoFi Stadium de Los Ángeles, donde los Rams le aplicaron la primera derrota con un espectacular Matthew Stafford. El equipo de Sean McVay se mantiene invicto con 3-0 y presenta su firme candidatura como contendiente de la NFC. En la franquicia de New England continuan con su reconstrucción, a consecuencia llegan con un récord perdedor de 1-2. Iniciaron la temporada con una derrota divisional ante Miami Dolphins, ajustada y con un balón suelto en la última serie, pero la liga es de resultados y no sensaciones. Le siguió una cómoda victoria ante los infames Jets y llegan con la reciente derrota ante los Saints. El nuevo líder del equipo es el novato Mac Jones que se está adaptando a la NFL.
Pero retrocedamos en la historia, exactamente al draft de 2000 cuando los Patriots seleccionaron a un despreciado quarterback de la Universidad de Michigan con la selección 199 de la sexta ronda. En su temporada como rookie era el cuarto quarterback del equipo y acabó siendo el suplente de Drew Bledsoe. En la segunda temporada Bledsoe se lesionó al final del segundo partido dando por iniciada la era de Tom Brady, esa misma temporada vencería su primer anillo en el Super Bowl XXXVI. Fue el inicio de la dinastía de los Patriots liderada por su head coach Bill Belichick y su quarterback Tom Brady, juntos consiguieron (en los 19 años de Brady como titular): vencer la AFC Este en 17 ocasiones y 11 años consecutivos hasta su marcha, 17 apariciones en play-offs y 13 presencias en el Juego por el Campeonato de la AFC (AFC Championship) con una racha de 8 consecutivas. Jugaron 9 finales de Super Bowl venciendo 6, para dimensionar este logro los Steelers eran la franquicia más vencedora de la liga con 6 títulos en toda su historia. Además marcaron hitos inolvidables como la temporada casi perfecta de 2017 donde vencieron todos sus partidos hasta la derrota en el Super Bowl o la histórica remontada en el SB LI que los Atlanta Falcons vencían 28-3 al final del tercer cuarto. Por el camino establecieron récords inalcanzables y dominaron la liga durante dos décadas.
La temporada de 2019 fue la última antes de su separación. Tom Brady se quedó sin su mejor objetivo, Rob Gronkowski se retiró, y el novato N'Keal Harry no tuvo impacto. Pese a todos los obstáculos los Patriots volvieron a tener una temporada ganadora y vencieron el título divisional de la AFC Este. Sin embargo por primera vez desde 2009 fallaron en conseguir el descanso en la primera ronda de los playoffs debido al colapso en diciembre, entraron con récord 10-1 y acabaron con 12-4. El colapso culminó en la última semana con una derrota en casa ante los rivales divisionales Miami Dolphins que traían récord perdedor 4-11. Las derrotas llevaron a los Patriots a la Ronda de Comodines (Wild Card) por primera vez desde 2009 donde perdieron contra los Tennessee Titans. Ese fue el último partido de Tom Brady en el Gillette Stadium.
Tras 20 años de unión llegó la ruptura del tándem Brady-Belichick, el final de una era de calibre Salón de la Fama entre dos de los mejores de la historia que tuvieron una relación fructífera de dos décadas formando una dinastía. Desde los medios se empezó una campaña de polémicas y debates entre ambas figuras, comparaciones absurdas alejadas de la realidad deportiva. Una narrativa que se ha recuperado con intensidad esta semana como antelación al partido más esperado desde su marcha. Pero pongamos en perspectiva la temporada de 2020, la primera separados. Para los New England Patriots fue su primera temporada con récord perdedor (7-9) y la tercera ocasión sin vencer la división y clasificar a playoffs desde 2000. Y bastante victorias consiguieron si analizamos su roster, Cam Newton fue el QB titular y tuvo muchos errores que costaron partidos, los receptores y alas cerradas no fueron objetivo y su producción fue muy limitada y la defensiva y el juego de carrera no pudieron sostener todo el peso. Hay que recordar que Edelman y Gilmore, dos estrellas del equipo, estuvieron lesionados y que los Patriots fue la franquicia más perjudicada por el opt-out (saltarse el año por COVID) donde destaca Dont'a Hightower. Esta temporada la reconstrucción avanza con el novato Mac Jones como titular y un roster mejorado con la llegada de objetivos como Nelson Agholor, Kendrick Bourne, Hunter Henry y Jonnu Smith, además de Matthew Judon, Jalen Mills y Kyle Van Noy. Un equipo más competitivo pero todavía con mucho trabajo mientras Bill Belichick hace milagros con una plantilla limitada.
Por otro lado Tom Brady llegó a los Tampa Bay Buccaneers, una franquicia con récord perdedor y en el segundo año del veterano Bruce Arians como head coach. Al sólido equipo que presentaban antes de la llegada del legendario mariscal, hay que añadirle los refuerzos que le dieron: Rob Gronkowski regresó de su retiro para seguir siendo su mejor compañero, Antonio Brown se unió a una unidad élite de receptores, LeSean McCoy y Leonard Fournette como opciones de carrera y la línea ofensiva se reforzó con Joe Haeg y el novato Tristan Wirfs. Un equipo lleno de grandes jugadores diseñado para el éxito, un Dream Team en busca del Super Bowl (Previa de los Tampa Bay Buccaneers 2020: Dream Team por el Super Bowl). Los Bucs clasificaron a playoffs por primera vez desde 2007 con récord 11-5 y un mes de diciembre pleno de victorias, en playoffs vencieron los tres partidos como visitante para llegar al Super Bowl LV que albergaban como anfitriones en su Raymond James Stadium. Enfrente estaban los campeoens Kansas City Chiefs de Patrick Mahomes, pero el dominio de la defensiva y la eficacia de Tom Brady dieron la victoria a los Bucs en el séptimo anillo de Brady, más que cualquier otra franquicia. Para 2021 defienden título y se han convertido en el primer equipo en la historia desde la entrada del límite salarial en mantener a todos los titulares del Super Bowl para la nueva temporada.
En el último partido de la jornada dominical se enfrentarán los Bucs, campeones del Super Bowl, contra unos Patriots en un duro proceso de reconstrucción. Un partido con amplías diferencias que tiene el atractivo del regreso de Tom Brady a Foxborough. Durante la semana la narrativa ha sido comparar el presente de Brady con el de Bill Belichick, la realidad es que ambos formaron una alianza que se favoreció mutuamente y no podría haber sucedido sin la otra parte. Dos leyendas del fútbol americano que tras dos décadas juntos tendrán su primer enfrentamiento en el icónico 'Sunday Night Football'. Un partidazo para disfrutar.
Hello from the other side. @TomBrady returns to New England this Sunday night.
— Sunday Night Football on NBC (@SNFonNBC) September 28, 2021
🎵: @Adele pic.twitter.com/EmISjoZwrh
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