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| Photo by Sebastian Widmann - UEFA/UEFA via Getty Images |
Portugal jugó su segundo partido como visitante, aunque hoy aparecía como local por temas organizativos, tras enfrentar a Hungría en Budapest (victoria por 0-3) y hoy a Alemania en Múnich. Ambas selecciones iniciaron con el mismo once que en la primera jornada, sin embargo Fernando Santos modificó el dibujo táctico dejando a Cristiano Ronaldo en solitario como delantero, Diogo Jota y Bernardo Silva en las bandas a pie cambiado y Bruno Fernandes como enganche. La intención del planteamiento era buena, pero Alemania comenzó con intensidad y dominando un partido que controlaron hasta el final. Fue el mejor partido hasta el momento de la UEFA EURO 2020 y apenas a los cinco minutos ya se había estrenado el marcador con un gol de Gosens, aunque finalmente fue anulado. Portugal tuvo un inicio con muchas dificultades, se acabó extendiendo a todo el partido, sin solidez defensiva ni control del balón. En uno de los pocos toques la selección lusa formó un enorme contraataque, Bernardo Silva sirvió un precioso pase a Diogo Jota y éste asistió con un pase de la muerte a Cristiano Ronaldo para abrir el marcador. Una enorme jugada que comenzó con el capitán rechazando el córner alemán y finalizó con su remate a gol. El partido siguió su guión y finalmente llegó lo inevitable, Alemania remontó antes del descanso con dos goles en propia puerta en apenas cuatro minutos, primero de Rúben Dias y luego de Guerreiro. En ambos tantos con ataques iniciados por la banda izquierda de Gosens.
Fernando Santos cambió a Bernardo Silva por el revulsivo Renato Sanches en el descanso para intentar la remontada, sin embargo Gosens volvió a entrar solo por la banda izquierda para servirle el gol a Havertz, misma jugada que en la primera parte y acabó con un gol en propia. Poco después llegó el merecido gol para Gosens tras rematar un centro de Kimmich, de nuevo el carrilero de la Atalanta entraba totalmente solo por su banda izquierda. Con un gol y una asistencia en las estadísticas, además del gol anulado y ser protagonista en todos los goles de su selección, salió sustituido a la hora de juego dando un respiro al maltratado Semedo y la organización defensiva lusa. Portugal redujo distancias, importantes para las cuentas finales en la última jornada, con un gol de Diogo Jota. Moutinho centró un córner que parecía no encontraba rematador hasta que la fe de Cristiano Ronaldo devolvió la asistencia del primer gol a Jota. En la recta final Renato Sanches disparó un misil que se estrelló al palo, pero la verdad es que Portugal nunca cró el peligro necesario para remontar.
La situación en el Grupo F, apodado de la muerte, queda muy igualada y plantea una intensa última jornada. Portugal enfrentará a Francia con ambas selecciones luchando por clasificar, será la repetición de la final de la EURO 2016. La actual campeona del mundo es la líder del grupo con 4 puntos tras el empate con Hungría, y aunque no está jugando a su máximo nivel obligará a Portugal a tener un partido serio para seguir en la competición. Un empate podría ser suficiente para que la selección luse avance a octavos de final como uno de los cuatro mejores terceros repitiendo la historia en la pasada eurocopa que acabaron como campeones.
EL DESASTRE TÁCTICO PREVISIBLE DE PORTUGAL
La decepcionante derrota por goleada de Portugal fue merecida, la selección nunca estuvo en posición de disputar y competir ante la superioridad alemana. Analizando al conjunto luso, el planteamiento no es erróneo pero las tareas individuales de cada jugador provocaron un hundimiento tan esperado como el del Titanic. Desde el inicio del torneo personalmente avisé que una de las debilidades de Portugal sería su defensa por bandas, el esquema fuerza a los laterales a involucrarse en ataque al no existir extremos y para mantener ese juego se necesita la colaboración del medio, en este caso, el doble pivote formado por William Carvalho y Danilo Pereira. Ambos jugadores no tienen ritmo competitivo, quizás una mejor opción sería iniciar a Palhinha que ha sido clave en el título del Sporting CP. Dejando de lado esas elecciones personales, William Carvalho se descuelga del pivote intentando simular una función al estilo inglés de box-to-box mientras que Danilo Pereira presiona la zona con balón obligando al lateral del lado contrario a cerrarse en posiciones centrales, obviamente esto deja grandes espacioes a su espalda. Este planteamiento es una táctica tan válida como otra, el problema es no modificarla según las características del rival. La formación de Alemania invita a creer que atacarán por el centro, no obstante sus dos carrileros -Kimmich y Gosens- entran por la banda. Estas incorporaciones fueron una sorpresa para Portugal que fue incapaz de frenarlas. Y aquí entran las críticas a Nélson Semedo, recordemos que inicia como titular por la baja de Cancelo, que ha sido incapaz de limitar el partidazo de Gosens que ha sido protagonista en los cuatro goles. Sin restar importancia a los errores de Semedo, la responsabilidad -y en este caso culpa- es de todo el conjunto y por consecuente de su seleccionador Fernando Santos. Semedo ha tenido la desgracia de enfrentar a Gosens, un carrilero con un perfil más ofensivo debido al estilo de la Atalanta, sin embargo el partido de Guerreiro tampoco ha sido positivo. Ha abandonado tareas ofensivas y en defensa también ha sufrido las incorporaciones de Kimmich, la diferencia es que es un jugador con menos incidencia por banda debido a su positición natural en el medio.
El otro error de Portugal también era previsible, la falta de control del balón y la creatividad ofensiva. Esa carencia tiene dos motivos, primero el doble pivote defensivo que está muy alejado del grupo de ataque (Jota, Bernardo Silva y Cristiano Ronaldo), y segundo dejar tanta responsabilidad y espacio a un solo jugador como Bruno Fernandes. Con el dominio del balón la selección lusa no tiene apoyos en la salida del balón, esto reduce la creatividad de sus jugadores más talentosos y no existen transiciones más allá de contraataques rápidos y directos. Soluciones para este problema es cambiar el sistema táctico, improbable bajo Fernando Santos, o los jugadores involucrados. Palhinha es difícil que tenga oportunidades, pero Renato Sanches ha mostrado ser un jugador diferente que aporta energía. Moutinho tiene la experiencia y la calidad para salir titular, mientras que André Silva continúa sin tiempo para mostrar su capacidad goleadora, algo que ha hecho durante toda la temporada en Alemania peleando con dos estrellas como Lewandowski y Haaland.
Analizando a los jugadores titulares, el doble pivote está decepcionando por su carga de trabajo y su falta de ritmo. Otra de las decepcionantes es Bruno Fernandes, afectado por el sistema táctico, está siendo uno de los jugadores desaparecidos del torneo y su carencia la sufre una Portugal necesitada de un cerebro en el centro del campo. Lo que se volvió a reafirmar, aunque no existían dudas, es el liderazgo de Cristiano Ronaldo. En el primer gol despejó el córner y llego a finalizar en el otra área con gol y en la segunda parte, con una desventaja de tres goles, su esfuerzo acabó por servir el gol a Diogo Jota devolviéndole el favor del primero.
FICHA DEL PARTIDO | PORTUGAL 2-4 ALEMANIA
Jornada 2 - Fase de grupos - Grupo F de la UEFA EURO 2020 | 19/06/2021 - 18:00 CET
Football Arena Munich, Múnich. Asistencia: 12.926 espectadores
Portugal (Fernando Santos): Rui Patrício; Nélson Semedo, Rúben Dias, Pepe, Guerreiro; William Carvalho (Rafa 58'), Danilo; Bernardo Silva (Renato Sanches HT'), Bruno Fernandes (João Moutinho 64'), Diogo Jota (André Silva 83') y Cristiano Ronaldo (C).
Alemania (Joachim Löw): Neuer (C); Ginter, Hummels (Emre Can 63'), Rüdiger; Kimmich, Gündoğan (Süle 73'), Kroos, Gosens (Halstenberg 62'); Havertz (Goretzka 73'), Müller y Gnabry (Sané 87').
Goles: 1-0 Ronaldo 15', 1-1 Rúben Dias pp 35', 1-2 Guerreiro pp 39', 1-3 Havertz 51', 1-4 Gosens 60', 2-4 Diogo Jota 67'.
Árbitro: Anthony Taylor (ENG). Amonestaciones: Havertz 66', Ginter 77'.
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