Alika Jenner/NFL |
Antes de iniciar la semana se produjeron dos movimientos que refuerzan aún más a dos contendientes, los Vikings tras su pésimo inicio se deshacen de Ngakoue que llega a Baltimore para potenciar aún más su enorme defensiva. En los Ravens se reencontrará con Calais Campbell, está firmando un gran año, donde fueron una máquina de capturas en Jakcsonville (o Sacksonville). El otro gran movimiento fue la llegada de Antonio Brown a los Buccaneers. El polémico receptor encuentra su enésima oportunidad gracias a la campaña de Tom Brady con quien tuvo gran conexión en su corta etapa en los Patriots. Según avanzan las semanas los Bucs se muestran más sólidos para vencer el Super Bowl e incorporan otra arma a una talentosa ofensiva, AB llega para ser objetivo luego de que los receptores Pro Bowl Mike Evans y Chris Goodwin atraviesan lesiones.
Para comenzar la semana volvimos a tener Thursday Night Football con un duelo divisional entre Eagles y Giants. La NFC Este es la peor división de la liga y volvió a quedar demostrado, el quarterback Daniel Jones se escapó en una enorme carrera que acabaría con touchdown de 88 yardas pero se tropezó antes de entrar en la zona de anotación. Con todo los Giants consiguieron ponerse 21-10 arriba con apenas 6 minutos por jugar en el último cuarto, sin embargo los Eagles se recuperaron con dos touchdowns consecutivos y fallar sus correspondientes conversiones de dos puntos. Dentro del aviso por dos minutos el discutido Carson Wentz lideró su ofensiva plagada de ausencias para lanzar el pase de la victoria a Boston Scott, luego Brandon Graham forzó un balón suelto sellando la victoria de Philadelphia. Los Eagles con récord 2-4-1 se colocan líderes de la única división con todos los equipos con récord perdedor, una división que nadie quiere ganar.
El final en Phildelphia solo fue la antesala del emocionante domingo que nos dejó la Semana 7 con finales en simultáneo donde la decisión llegó en la última jugada. En Atlanta tienen una maldición, siguen sin saber cerrar los partidos con o sin Dan Quinn. Solo uno por debajo y con la posesión solo tenían que correr el reloj para ganar el partido pero Todd Gurley anotó el touchdown sin querer y dio esperanza a Detroit, Matthew Stafford montó una serie y acabó lanzando a T.J. Hockenson el touchdown del empate (Atlanta había anotado la conversión de dos puntos) y Matt Prater anotó el punto extra para la importante victoria para Lions.
La batalla por Ohio fue un duelo entre dos primeras selecciones del Draft, el novato Joe Burrow lanzó más de 400 yardas y 3 touchdowns, el último en un momento "clutch" con el partido sobre la línea y en cuarta oportunidad y centímetros cuando lanzó a Bernard para ponerse en ventaja. Baker Mayfield, que tuvo un inicio de partido pobre, montó una serie en apenas 1 minuto y lanzó un enorme pase al novato Donovan People-Jones para conseguir la victoria en los últimos instantes. Los Cincinnati Bengals todavía tuvieron opción a lanzar un "Ave María" que acabó incompleto tras varios rechaces y los Cleveland Browns se llevaron una victoria que sigue con su senda ganadora en esta temporada aunque perdieron por lesión a la estrella OBJ.
Al mismo tiempo también en Tennessee se medían dos equipos invictos en un auténtico partidazo que es digno de playoffs. Los Steelers estaban en la zona roja en el final del partido cuando Ben Roethlisberger fue interceptado en la zona de anotación dando una oportunidad final para los Titans que montaron una serie para mandar el partido a la prórroga, tristemente para los aficionados locales Gostkowski falló el gol de campo de 45 yardas y Pittsburgh se mantiene como el único invicto de la temporada. Los Acereros están mostrando un nivel fantástico y controlaron el partido del domingo, en la ofensiva con la posesión del balón y eficiencia en los momentos claves y en la defensiva frenando la amenaza de Derrick Henry.
Otro final ajustado se dio en Nueva Orleans con la victoria de los locales en una buena tarde para su ofensiva donde fue efectiva, dominó el reloj y además convirtió terceras oportunidades; una gran muestra de su dominio es que no tuvieron ninguna patada de despeje. Los Saints consiguen su tercera victoria en fila para afrontar su parte más dura del calendario con partidos contra Bears, Bucs y 49ers. Los Panthers tuvieron opción de empatar el partido pero Marcus Davenport capturó a Bridgewater y Joey Slye no consiguió acertar el gol de campo de 65 yardas. Pero la ajustada derrota en el Superdome es una esperanza para el futuro de Matt Rhule y la franquicia que recuperarán a su estrella Christian McCaffrey.
Y para finalizar el domingo en el Sunday Night Football disfrutamos de uno de los mejores partidos de la temporada donde los Cardinals le quitaron el invicto a los Seahawks. Seattle estuvo en ventaja durante todo el partido pero Arizona recuperó una desventaja de 10 puntos con un gol de campo de Zane Gonzalez con el tiempo expirando. Entonces comenzó la locura del tiempo extra, primero los Seahawks recibieron el balón pero tuvieron que despejar y los Cardinals helaron a su propio pateador que falló el gol de campo de la victoria (antes del tiempo muerto lo había anotado). Seattle volvió a tener oportunidad, D.J. Metcalf vio revertido su touchdown por una penalización y Russell Wilson lanzó su tercera intercepción del partido en un gran momento del novato Isaiah Simmons, el equipo de casa aprovechó los errores rivales y Zane Gonzalez se redimió anotando el gol de campo victorioso y los Cardinals protagonizan la segunda sorpresa del año (en la Semana 1 vencierona los 49ers).
En otros partidos de la jornada dominical tuvimos otro duelo de la nefasta NFC Este, si Eagles y Giants ofrecen poco, Cowboys y Washington no son mucho mejores. En Dallas siguen necesitando a Dak Prescott, quién lo diría a inicio de temporada, y actualmente son un equipo sin noticias positivas. La defensiva de los Cowboys tiene un año muy pobre y una ofensiva tan limitada como la de sus rivales fue capaz de anotarles 25 puntos. El reemplazo Andy Dalton también tuvo que salir del partido por lesión y la etapa de Mike McCarthy como head coach de Dalles tiene un futuro desesperanzador. Todo lo contrario que para Washington, su HC Ron Rivera acabó el tratamiento para el cáncer celebrando la victoria conseguida el día anterior, Washington con todas sus broncas tiene un equipo muy prometedor para el futuro con jóvenes como Terry McLaurin, Montez Sweat o los novatos Chase Young y Antonio Gibson.
La suerte ahora para Dallas es que hay un equipo todavía peor en la liga: los New York Jets. Volvieron a perder pese a una buena exhibición de su defensiva y con Darnold de nuevo a la titularidad aunque sentenció la derrota lanzando una intercepción. Los Jets Intentaron ser competitivos pero no les alcanza, Buffalo Bills se llevó una victoria, volvieron a mostrar dificultades en la zona roja y Josh Allen bajó su nivel pero a final de año cada victoria cuenta, y más si quieren liderar su división y llegar a playoffs.
Y hablando de equipos perdedores, ahí están también los Houston Texans con un récord 1-6. Volvieron a intentar competir pero el rival no les dio oportunidad, Green Bay Packers llegaban tras la dolorosa primera derrota contra Bucs y llegaron a Houston con las ganas de demostrar que son dignos contendientes. Aaron Rodgers lanzó 4 pases de touchdown, su línea ofensiva fue sólida al igual que la defensa que frenó y Davante Adams fue el gran protagonista con 196 yardas y 2 touchdowns.
En la franja de la tarde los Buccaneers se llevaron el duelo de piratas contra los Raiders. El TB de Tampa Bay se convertirá en Tom Brady, el veterano quarterback tuvo una tarde alegre en la paliza a su rival por 45-20, encontró química en una ofensiva a la que se unirá Antonio Brown, los regresos de Chris Godwin y Leonard Fournette ayudaron. Las Vegas bajaron toda la expectativa que generó su victoria a los Chiefs y al final no es un contendiente tan serio su irregularidad les saca de la conversación por el Super Bowl.
Y mientras Tom Brady disfruta de su nuevo equipo, los New England Patriots se hundieron en otra decepcionante derrota y esta vez con paliza incluida. Los San Francisco 49ers fueron superiores durante todo el partido, manejaron el reloj con un productivo juego de carrera encabezado por Jeff Wilson Jr. al que perderán por unas semanas junto con Deebo Samuel por lesión. Los Niners mostraron ser superiores y al mismo tiempo nos enseñaron las carencias de los Patriots al que les falta mucho talento, especialmente en el puesto de quarterback en un nefasto partido de Cam Newton que acabó en el banquillo.
El primer partido nevado del año llegó en Denver y vino con regalo: una enorme paliza del vigente campeón. Luego de la inesperada derrota contra Raiders, los Kansas City Chiefs mostraron madera de campeón y manejaron el partido dominando ambos lados del balón. En la ofensiva se estrenó Le'Veon Bell con sus primeras jugadas y hasta el mariscal suplente anotó, en los equipos especiales Byron Pringle retornó una patada de inicio hasta touchdown de 102 yardas y la defensiva tuvo buenos números y también consiguió anotar. En parte gracias al mal partido de Drew Lock que lanzó dos intercepciones, pero fue un pésimo partido en líneas generales para los Broncos y hasta Melvin Gordon perdió dos balones.
En el otro partido de la tarde los Chargers consiguieron vencer a los Jaguars en un sólido partido de su defensiva con el brillo de Justin Herbert. El novato sigue demostrando que tiene talento para ser el quarterback de la renovada franquicia de Los Ángeles y lideró la victoria en casa para sumar su primer triunfo en la NFL, superó las 400 yardas combinadas y fue el líder de su equipo por tierra. Los Jacksonville Jaguars intentaron disputar el partido pero murieron en la orilla, el heroísmo de Gardner Minshew y la sorpresa de James Robinson en la carrera siguen siendo escasos, necesitan más talento.
Para acabar la semana, en el Monday Night Fooball, Los Angeles Rams consiguieron llevarse la victoria con una sólida exhibición donde dominaron ambos lados del balón. En un partido predominante entre defensivas, la defensa angelina limitó a los Chicago Bears a solo 3 puntos al final del tercer cuarto, además capturó en 4 ocasiones a Foles y le interceptó en otras dos, una de ellas dentro de las diagonales. La defensiva de Chicago anotó el único touchdown de su equipo en el último cuarto con una devolución de un balón suelto pero no consiguió frenar a los Rams ni por aire ni tierra. Matt Nagy tuvo un llamado de jugadas pésimo y el juego de carrera de Chicago sigue siendo inexistente, con todo se quedan con récord de 5-2, el mismo que los Rams que siguen invictos en su nueva casa, el SoFi Stadium.
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