El Barcelona necesito de casta y orgullo propio para llevarse los tres puntos de un partido que el Getafe encarrilo muy temprano pero vio como Pedro se lo arrebataba de las manos. Partidazo de un Pedro estelar que fue el gran protagonista con un Hat-trick, una asistencia de gol y provocando un penalti.
Dichas carencias se mostraban tan solo minutos después cuando Lisandro remataba a gol un saque de esquina, totalmente libre de marca. En tan solo un cuarto de partido, el Getafe con más imprecisiones del equipo azulgrana que por juego propio decantaba el partido a su favor y dejaba al equipo catalán herido de muerte.
Pero el Getafe no supo gestionar esa ventaja y las jugadas de ataque del Barça llegaban con más asiduidad, sobretodo por la banda izquierda de Pedro. Era el mismo jugador canario quien demostraba lo que estaba por venir cuando vio como le anulaban un buen gol por fuera de juego, inexistente. Pero esa jugada era prologo del recital que un Pedro estelar estaba apunto de ofrecer en el coliseo.
En las próximas tres ocasiones que tendría el extremo azulgrana, el balón acabaría durmiendo en las redes de la portería. El primero llegaría tras una gran asistencia de Cesc Fàbregas, que Pedro culminaba con una vaselina a Moya. La jugada tendría que haber sido invalidada ya que el balón había salido fuera de banda antes de la asistencia de gol. Undiano le devolvía así el gol mal anulado a Pedro.
Solo unos minutos más tarde, llegaría el segundo, en la siguiente jugada que el balón volvería a los pies de Pedro. El canario marcaba tras una finta en el interior del área y una gran rosca directa a la esquadra. Un golazo que empataba el partido y derrumbaba la moral del equipo madrileño. Una moral que se convertiría en desesperación cuando una vez más, Pedro, haría el tercero a bocajarro y llevaría al Barça al vestuario por delante en el marcador.
La segunda parte no habría más momentos para la sorpresa y el Barça cerraba el partido cuando Cesc Fàbregas, que arrancaba en posición ilegal, remataba a gol una asistencia de Pedro, poniendo el cuatro a dos, que se convertiría en un cinco a dos cuando el Getafe totalmente desesperado cometía un penalti absurdo sobre, una vez más, Pedro, que Cesc transformaba en gol por el lado izquierdo de Moya.
Los últimos minutos del partido se agotaron con el Barcelona controlando el balón e intentando timidamente anotar un nuevo gol que apunto estuvo de llegar cuando Alexis disparo ajustado al lado derecho de la portería de Moya.
El Barcelona, que había arrancando creando muchas dudas y mostrando una mala actitud, tiraba de orgullo propio para lograr una remontada que vale tres puntos, el liderato y alarga así la mejora de los de Martino después del pequeño bache frente a Ajax y Athlético.
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