Empate a cero en un partido muy físico, con muchas alternativas de juego entre los dos conjuntos pero, ninguno ha sido capaz de variar el marcador en los 90 minutos.
El Everton de Roberto Martinez, técnico español ya consagrado en el fútbol ingles entre otras cosas por su gran trabajo en el Wigan, sigue necesitando tiempo para recuperarse de la etapa de Moyes, y adaptarse a la filosofía del español. Aun a si, se puede considerar ligeramente el más destacado y con más razones para rozar la victoria, ante un Cardiff en evolución, que venia de haceserlo pasar muy mal al Manchester City de Manuel Pellegrini, con gran presencia de su flamante fichaje, Gary Medel, ex del Sevilla y de la liga española, que ha dejado la capital hispalense en busca de un proyecto marcado por el aumento económico.
Con respecto al partido los dos equipos han intentando varias alternativas con respecto al gol, como es el juego por bandas o el juego interior, y el juego de balón largo, tan atractivo y común en el fútbol ingles, que presta una gran espectáculo y resultado. Pero a pesar del dinamismo táctico, las desafortunadas llegadas del Cardiff y las paradas del portero local, desquiciaron a un Everton, plagado de jóvenes (entre los que tuvo minutos Deulofeu) y con un sistema que les permitió adueñarse del balón. El Everton dominó, por lo tanto la primera mitad, tanto que estuvo a punto de materializar una de las tantas ocasiones que acosaban la portería
de Marshall, de esta jugada viene la polémica del partido, unas manos del defensa del Cardiff que debió ser penalti a favor del Everton.
Con el transcurso del partido el Cardiff capitaneado por la incansable actividad defensiva de Medel, se encontró cómodo y empezó a presionar muy delante, tanto que, como se ha dicho antes, también estuvieron a punto de materializar las ocasiones.La mas clara una de Bellamy rondando el minuto 60´. Con esto llego la respuesta de Roberto, que introdujo en el campo a Kone para buscar el gol en la recta final que le diera los tres puntos en un partido importante de cara al cumplimiento de los objetivos marcados. Pero el encuentro en los últimos minutos se desvaneció, causa del derrochamiento físico, que puso fin al partido con un empate a cero.
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